Los carteles en zonas concurridas aconsejarán a los visitantes que no se detengan bruscamente ni bloqueen los pasos, que sean conscientes de su entorno al hacer fotos y que no se salten las colas.
Los turistas extranjeros en Japón han provocado la ira de los residentes tras una serie de actos irrespetuosos. Un visitante estadounidense fue detenido tras hacer grafitis en el santuario Meiji Jingu de Tokio, un británico ha sido relacionado con un robo de 13 millones de yenes (80.000 euros) y una turista chilena fue grabada haciendo dominadas en la puerta de un santuario.
Afortunadamente, este tipo de delitos son poco frecuentes. Pero en Japón los turistas pueden incumplir fácilmente las normas de comportamiento sin darse cuenta. Debido a las diferencias culturales y de costumbres, lo que para los japoneses puede ser una norma "obvia, no siempre lo es para los viajeros extranjeros", explica la Agencia de Turismo de Japón (JTA).
"Aunque la demanda turística se recupera constantemente y sigue una trayectoria de fuerte crecimiento, hay algunas zonas en las que la mala educación de los turistas se está convirtiendo en un problema". La JTA ha publicado nuevas guías escritas y pictóricas, con texto en cinco idiomas, para promover un comportamiento respetuoso y responsable de los visitantes. He aquí algunas de las principales normas de etiqueta y costumbres que hay que tener en cuenta.
Tenga cuidado al hacer fotos y guardar el equipaje
Para combatir la masificación, la campaña de la JTA aconseja a los visitantes que eviten los destinos o atracciones más concurridos en las horas punta y que, en su lugar, hagan turismo entre semana, a primera hora de la mañana o por la noche para disfrutar de una visita más relajada.
También se pide a los turistas que eviten hacer turismo en horas punta, cuando la población local utiliza el transporte público para ir y volver del trabajo o la escuela. Las señales indicarán si una atracción está abierta a los visitantes a primera hora de la mañana o por la noche.
La JTA anima a los visitantes a viajar ligeros poniendo las maletas y bolsos grandes en un servicio de guardaequipajes, una consigna o un servicio de mensajería de equipajes, que estarán señalizados en los lugares turísticos más populares. Respetar los bienes culturales de Japón es otra norma clave.
"Los templos y santuarios japoneses, de gran valor histórico y cultural, se han conservado durante generaciones como nexo de unión de la fe religiosa y símbolos de sus localidades", reza el material de la campaña. "Desfigurar bienes culturales con pintadas o marcas de cualquier tipo causa daños irreparables a estas valiosas estructuras, por no hablar de que constituye un delito".
También se insta a los turistas a depositar la basura y el reciclaje en las papeleras o a llevárselos a casa. Para apoyar a las comunidades locales, se anima a los visitantes a comprar artesanía local y comidas elaboradas con ingredientes locales. También habrá señales en las zonas más concurridas que aconsejen a los visitantes no detenerse bruscamente ni bloquear los pasos, ser conscientes de su entorno al hacer fotos, no mirar el móvil mientras caminan y no hacer colas.
¿Caminar y comer es tabú en Japón?
Otra señal que puede verse al explorar Japón indica a los visitantes que no deben comer mientras caminan. Esto tiene un nombre en Japón: 'tabearuki', y a menudo se advierte a los turistas de que no lo hagan, ya que se cree que cuando se come y se camina, no se está respetando la comida.
La JTA anima a buscar un parque tranquilo para sentarse y disfrutar del tentempié. Y, como norma general, hay que evitar los alimentos desordenados y las bebidas sin tapa, sobre todo en zonas concurridas donde se corre el riesgo de chocar con los demás. En algunos lugares, como mercados de comida o festivales, comer de pie no está mal visto, pero la mejor práctica general es apartarse de la multitud para consumir los refrescos.
En Japón hay que moderar el afecto en público y las conversaciones en voz alta
Aunque no es una norma rígida, se recomienda a los visitantes que eviten las muestras excesivas de afecto en público y los saludos físicos, como abrazos y besos. "Si no está seguro de si alguien se siente cómodo, lo más seguro es inclinarse", aconseja la Organización Nacional de Turismo de Japón.
Del mismo modo, hay que bajar la voz en las conversaciones, sobre todo en restaurantes y transportes públicos. Lo mismo se aplica a las llamadas telefónicas, que están totalmente prohibidas en muchos medios de transporte. Como regla general, adapte su nivel de voz y sus modales a los de quienes le rodean, y no se equivocará.